Las mezclas de leche y huevos espesados ​​por el calor han sido durante mucho tiempo parte de la cocina europea, al menos desde la antigua Roma. Las natillas horneadas en pasteles ( tartas de natillas ) fueron muy populares en la Edad Media , y son el origen de la palabra inglesa 'natillas': el término francés ' croustade ' originalmente se refería a la corteza de una tarta, y se deriva de la palabra italiana crostata y, en última instancia, la crustáre latina .

Porciones: 4

• 80g de azúcar
• 1 cucharada de fécula de maíz
• 100cc de agua
• 30g de manteca
• 1 cucharadita de esencia de vainilla
• 6 cucharadas de crema o leche
• canela en polvo

1. Mezclar el azúcar con la fécula en una sartén. Agregar el agua, y mezclar con un batidor de alambre. Una vez que se hayan disuelto, calentar a fuego bajo, revolviendo de vez en cuando.
2. Cuando empiece a burbujear, y se empieza a caramelizar, cocinar a fuego bajo por 1 minuto más, revolviendo constantemente. Ahora el azúcar se transformó en jarabe.
3. Retirar del fuego y agregar la manteca y la esencia de vainilla. Cuando la manteca esté toda disuelta, incorporar la crema de leche.
4. Servir en porciones espolvoreando canela y refrigerar, también se puede Servir tibia